Último día en Jokelan Koulu
Ayer fue nuestro último día en Jokelan y no pudo ir mejor. Comenzamos el día repasando inglés con los peques. La verdad que nos gustó mucho la idea de que cada año a través de su libro de texto viajan a un país diferente y no sólo aprender cosas sobre su cultura sino que, además, estudian diferencias de vocabulario entre el inglés de un sitio y el de otro.
Luego nos fuimos a unas clases que ya vimos en Dinamarca y que, por mucho que las veamos, nos siguen sorprendiendo. La primera era la clase de manualidades. A partir de tercero (en primero y segundo hacen manualidades más sencillas en su aula), el alumnado pasa a la clase de manualidades donde trabajan una creación con madera y otra con metal. No os imagináis lo impresionante que es ver a peques de tercero con la sierra o utilizando el gato para moldear el metal.
El profesor nos contó que, a medida que van creciendo se les deja utilizar incluso máquinas como la radial (en sexto y con supervisión) pero, la verdad que nos dejó de piedra. Que arte!
El alumnado que estaba en esta clase era solamente la mitad ya que la otra mitad estaba en la clase de costura. Aquí planificaban durante tres meses una actividad que, en este caso fue diseñar su propia bolsa (boceto, elaboración, decoración...). La profesora nos contó que empiezan a usar la máquina de coser en tercero y, como en el caso de manualidades, previamente aprender en su clase las puntadas más básicas. Pasados estos tres meses, cambian los grupos para que todos practiquen manualidades y costura.
Una cosa que nos apuntamos porque nos pareció novedosa y nos gustó mucho es que, una vez acabada la actividad -tanto en tecnología como en costura- el alumnado debía escribir en una página privada de una web tipo blogger una reflexión sobre todo el proceso que habían llevado a cabo: cuáles habían sido las dificultades, como las habían superado y su feedback. Estas páginas sólo las pueden ver los profesores. De hecho se trata de una actividad muy popular que se hace no sólo en estas asignaturas sino también en religión, historia, arte, tecnología, música y ciencias.
La última clase a la que asistimos fue a la de música con Markus. En esta clase estuvimos enseñándoles un juego llamado la serpiente que les encantó y también les introdujimos varios platos de la gastronomía española. Además, aprendimos que en este cole y en muchos otros se organizan bandas escolares. Nos llamó especialmente la atención la cantidad de instrumentos que hay en clase! Es una pasada! El profe nos dijo que aprenden a utilizar muchos instrumentos. De hecho, en esa clase nuestras profes estuvieron intentando tocar el ukulele.
Esta clase de música y gastronomía mezclada es una de las distintas optativas a las que el alumnado puede optar cuando llegan a sexto de primaria. Las otras opciones son Mindfulness, alemán, arte, tecnología o deporte).
Por último tal y como pasaba en otros países que hemos visitado, los patios no tienen vallas y se le ofrece al alumnado la posibilidad de interactuar con el medio que los rodea. Además, aquellos que no quieren salir pueden quedarse dentro hablando o jugando a cualquier otra cosa.
Para despedirnos os dejamos el ejemplo de un horario de sexto y así os hacéis una buena idea de como funciona una clase de este curso en un país tan diferente a la par que interesante como es Finlandia.
Sinceramente ha sido una visita increíble. No nos hemos podido sentir más arropadas ni más bienvenidas. Hasta nos dedicaron una canción los profes para la despedida. ¡Que artistas! A ver si tenemos suerte y no en mucho vienen a nuestro cole y les podemos recibir con el mismo cariño y buen hacer.
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