PARABENS
Ayer fue un día muy intenso y llegamos a casa tan cansados que decidimos dejar el blog para esta mañana. Empezamos el día participando en la celebración del aniversario de la escuela J.I. Pinhal do General, que solamente tiene niños y niñas de infantil. Cumplían 8 años desde que se inauguró y uno desde que decidieron convertirse en comunidad de aprendizaje. Invitaron a las familias y a los voluntarios y voluntarias, cantaron cumpleaños feliz y comieron un bolo (una tarta). Es curioso que la letra de la canción en portugués es muy distinta a la de castellano:
Muchas felicidades
Muchas felicidades
y muchos años de vida.
Hoy es día de fiesta
y cantan nuestras almas
Démosle a _________
Una ronda de palmas
y que, una vez se termina de cantar, el homenajeado (en este caso lo hicieron todos los docentes) contestan con otra estrofa:
Desde el fondo del corazón
por haberme cantado
esta linda canción.
Las funcionarias y las maestras habían preparado un obsequio para todos los asistentes que también nos han dado a nosotros como recuerdo de esta celebración. El resto de la mañana lo pasaron realizando juegos tradicionales con la ayuda de las familias y las personas voluntarias.
Marta nos llevó a comer a un restaurante escondido donde va la gente del pueblo y hemos podido disfrutar de la mejor dorada de nuestra vida. Para el café pudimos probar las famosas tortas de Azeitao, que estaban también riquísimas.
Por la tarde Mafalda nos esperaba en su cole para participar en la tertulia literaria dialógica de su clase de terero y cuarto. Están leyendo La Isla del Tesoro de Robert Louis Stevenson y fuimos parte de la misma. Los niños y niñas de Mafalda nos ayudaron a entender algunas de las expresiones y nos dejaron participar con nuestras dudas y preguntas. Fue muy interesante ver el clima de respeto que había en la clase y ver cómo una niña de nueve años moderaba la tertulia.
Al acabar estuvimos comentando con Mafalda las dudas que nos habían surgido y los aspectos más importantes de la tertulia.
En el apartado cultural decidimos pasear de nuevo por Lisboa y acercarnos a su famosos Mercado da Ribeira donde pudimos degustar las famososa croquetas de bacalao. Una jornada diferente.
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